No llames a los chapas, a menos que sea a Sherlock. Él sí es chévere. Acá hablamos de «polis y choros» desde los libros y las palabras que nos inventamos para referirnos a ellos.
No llames a los chapas, a menos que sea a Sherlock. Él sí es chévere. Acá hablamos de «polis y choros» desde los libros y las palabras que nos inventamos para referirnos a ellos.